La Escuela Provincial de Folclore, Música y Danza Tradicional de la Diputación edita una publicación sobre las Castañuelas en Palencia que sirve como primer inventario de este instrumento singular en nuestra provincia
- La diputada de Cultura, Carmen Fernández y el coordinador de la publicación, Carlos del Peso, fueron los encargados de poner énfasis y valorar el libro en rueda de prensa, como documento a tener en cuenta a la hora de dar relevancia a este instrumento.
- En la presentación estuvieron además Esther Miguel, autora de fotografías, dibujos y plantillas, Pedro Miguel, artesano que ha reproducido muchas de las piezas encontradas y Felipe García, antiguo danzante de la Danza de Villamediana, que ha conservado los toques propios de esta antigua danza cerrateña.
- Las castañuelas formaron parte importante del baile tradicional y todavía aparece el instrumento muy asociado a las danzas de danzantes de la provincia, con toques propios y característicos, especialmente en comarcas como la Tierra de Campos, El Cerrato y en menor medida la Vega de Saldaña,
- La publicación, de la que se han editado 500 ejemplares, supone el primer ejemplo de inventario provincial en España dedicado a este instrumento.Medio centenar de piezas documentadas, entre pitos, castañuelas y tarrañuelas. Esto permitirá la fabricación por parte de los lutieres interesados de modelos de castañuelas que sigan la tradición palentina.
- El libro puede adquirirse al precio de 20 euros en librerías, a través de los cauces habituales de distribución de que dispone la Diputación.
La sala de diputados del Palacio Provincial sirvió de marco para la presentación del libro Las Castañuelas en Palencia, enmarcada dentro de las publicaciones de la Escuela de Folklore de la institución provincial. La obra coordinada por Carlos del Peso supone el primer ejemplo de inventario provincial en España dedicado a este instrumento idiófono (que produce el sonido por la vibración del propio cuerpo, sin uso de cuerdas, membranas o columnas de aire), singular en nuestra provincia.
La diputada de Cultura, Carmen Fernández y el coordinador de la publicación, Carlos del Peso, fueron los encargados de presentar el libro, junto a la encargada de la parte gráfica, Esther Miguel, el artesano, Pedro Miguel, y el danzante de Villamediana, Felipe García.
Las castañuelas al igual que otros instrumentos menores como la pandereta o la zambomba, han participado en una serie de prejuicios excesivamente simplistas y que sólo el conocimiento y el profundizar en ellos puede ayudar a darles la visibilidad patrimonial que se merecen. Estas pequeñas piezas de madera fueron obra de pastores que, a punta de navaja, las ornamentaban con motivos incisos y vaciados, en multitud de formas, tamaños y tipologías. Algunos ejemplares han conservado decoraciones de anilinas de colores entre el tallado y en ocasiones se incluía en la propia pieza, las iniciales del dueño, o el año.
Las castañuelas formaron parte importante del baile tradicional y todavía aparece el instrumento muy asociado a las danzas de danzantes de la provincia, con toques propios y característicos, especialmente en comarcas como la Tierra de Campos, El Cerrato y en menor medida la Vega de Saldaña.
MEDIO CENTENAR DE PIEZAS. La obra cuenta con una introducción sobre el instrumento y su vinculación a Palencia aportada por el etnógrafo Carlos Porro, y un interesante inventario de piezas documentadas, con medio centenar de ellas entre pitos, castañuelas y tarrañuelas. Todas las piezas se acompañan con distintas fotografías y sobre todo con unos interesantes dibujos y plantillas acotadas elaboradas por Esther Miguel, que ha servido para reproducir los ejemplares al milímetro. Esto permitirá la fabricación por parte de los lutieres interesados de modelos de castañuelas que sigan la tradición palentina, devolviendo el protagonismo de estos instrumentos que, en las últimas décadas, se han visto substituidos por la castañuela andaluza, de un corte y un sonido alejados de la tradición de nuestras danzas de danzantes.
“Esperemos que esta publicación ayude a recuperar la memoria de al menos más de cuatro siglos, sirviendo para minimizar el falseado continuo de nuestro folklore y el desprecio hacia este sencillo instrumento musical que acompañó durante décadas las danzas de danzantes y aun el baile más tradicional, devolviendo el latido a nuestras castañuelas más propias, aquel sonido que nunca debimos perder”, apuntaba el coordinador de la publicación, Carlos del Peso.
